a mí también es lo que más me gusta, brocken, la neta. mencantaría algún día encontrar la palabra perfecta para eso...
gracias por lo del arte. costó un trabajo horrible escribir con luz, al revés y en "el aire". por eso, cuando me di cuenta de que sobraba la palabra (y sílaba) me en el primer verso ya dije: a la chingada!
un abrazo
gracias al negro y al buen vicadín por pasar. estéfano, me debes una cena!
Más allá de la figura quiásmica, mi profesor de latín nos alertaba sobre el número de verbos. Está también el ritmo, claro, aunque sea tan breve. No es un ritmo uniforme. Estalla o culmina con énfasis en el excrucior. A este verbo lo veo a la vez como un abrazo destructor y un abandonarse: visión reflejada en el excruci (estrujamiento) or (desparrame).
claro, no es sólo su hermosa estructura quiásmica. yo no tuve profesor de latín, tristemente, pero creo que sí medio intuyo ese ritmo ajetreado --aunque el poema tenga esa brevedad extrema, afilada.
podríamos hacer, brocken, una buena colección de versiones [aquí nada más ya hay 5] y tal vez con ellas un rompecabezas del dístico o algo.
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el original de catulo va así:
odi et amo. quare id faciam, fortasse requiris?
nescio, sed fieri sentio et excrucior.
aquí hay una imagen que facilita agarrarle la onda a su estructura: clic
lope lo reprodujo así en la dorotea:
de amor y aborrecimiento
tan igual veneno tomo,
que si me preguntan cómo
no sé más de que lo siento.
en fin.
uh lalaaaa...
el de Juan Manuel Rodríguez Tobal dice así, Odio y amo. ¿por qué hago yo esto?, preguntes acaso. Yo no lo sé, mas lo siento y ello me causa dolor.
No hallará paz con él, ni bien conmigo:
él, que sólo la quiso, la desprecia;
yo, que tanto la amaba, la maldigo.
y me recuerda non só per che a la de:
Tuvo un reino una vez tantos beodos,
que se puede decir que lo eran todos etc.
Siempre, desde la primera lectura, me fascinó la fuerza del "excrucior" final.
Lindo el arte.
odio y amo. qué se yo por qué. pero pasa y me revienta.
a mí también es lo que más me gusta, brocken, la neta. mencantaría algún día encontrar la palabra perfecta para eso...
gracias por lo del arte. costó un trabajo horrible escribir con luz, al revés y en "el aire". por eso, cuando me di cuenta de que sobraba la palabra (y sílaba) me en el primer verso ya dije: a la chingada!
un abrazo
gracias al negro y al buen vicadín por pasar. estéfano, me debes una cena!
Me recordó un pasquín que circulaba por el Chopo hace ya muuuchos años...
Leí la Antrobiótica jornalera de hoy, me latió mucho. Lo que dice el Padrino de Pizzas La Torre es totalmente cierto.
Abrazo.
Te vamos a poner ejercicios -como los que me ponían de chiquito disque para mejorar la letra-...jejejeje.
yo también diría -gracias a sucesos de esta semana- "no sé más de que lo siento"...
Un gran abrazo alón.
nche santuario, intenta escribir en el aire!
todo un hallazgo il capo della balbuena, que ni qué.
odiar, amar, qué importa. yo te siento, no te basta y me destruyo.
Más allá de la figura quiásmica, mi profesor de latín nos alertaba sobre el número de verbos. Está también el ritmo, claro, aunque sea tan breve. No es un ritmo uniforme. Estalla o culmina con énfasis en el excrucior. A este verbo lo veo a la vez como un abrazo destructor y un abandonarse: visión reflejada en el excruci (estrujamiento) or (desparrame).
claro, no es sólo su hermosa estructura quiásmica. yo no tuve profesor de latín, tristemente, pero creo que sí medio intuyo ese ritmo ajetreado --aunque el poema tenga esa brevedad extrema, afilada.
podríamos hacer, brocken, una buena colección de versiones [aquí nada más ya hay 5] y tal vez con ellas un rompecabezas del dístico o algo.
un abrazo
me acaban de presentar tu blog y quede enamorada de el, me encanto como escribes y espero seguir leyendote. saludos